24 noviembre 2012

Lección de economía: "Se veía venir..."


"No hay bien que siempre dure,
de lo malo a lo bueno se va bien,
pero de lo bueno a lo malo que mal se va a ir
y eso es lo que va a venir".

Valdegeña, Soria - año 2007 D.C.

22 septiembre 2012

Lo importante y lo extraordinario


Uno se da cuenta de la fragilidad que le habita
cuando considera un éxito imprescindible
conseguir atar los cordones de sus zapatos.

Lo importante en nuestra vida es simple, breve y sencillo:

¡Vivir!

(respirar, beber, comer, defecar; 
reproducirse)

Lo extraordinario, ideal y difícil:

¡Vivir bien!

(Salud, en abundancia; 
amor, el necesario;
dinero, el imprescindible; 
dolor, el inevitable).

Gonzalo Seijo

El cambio de los patrones mentales


08 septiembre 2012

Aplicaciones gratuitas para una mejor organización y productividad


Agenda y Calendario

Google Calendar
La agenda de contactos y calendario de Google. Permite organizar eventos y tareas bajo una interfaz muy accesible, visual e intuitiva. Puedes compartir el calendario con tus contactos y sincronizarlo con tus dispositivos móviles.

Documentos y gestión de archivos

Google Drive
El servicio de almacenamiento y edición de archivos en la nube de Google. Cada usuario cuenta con 5 GB de espacio gratuito para almacenar archivos. El acceso se hace a través del pc o del dispositivo móvil. Además, permite crear y editar documentos de texto, hojas de cálculo y presentaciones online. La edición puede per personal o colaborativa.

Dropbox
Uno de los servicios de almacenamiento en la nube más extendido. Dropbox facilita el acceso a tu espacio de almacenamiento a través del pc y de dispositivos móviles, aunque a diferencia de Google Drive no permite la edición de archivos.

Notas

Evernote
La aplicación por excelencia para guardar tus ideas. Evernote es perfecto para tomar notas, guardar páginas web interesantes, grabar mensajes de voz, guardar archivos PDF, crear listas de tareas, hacer fotos y mucho más. La información guardada en tu cuenta es accesible tanto desde pc como desde cualquier dispositivo móvil. Es ideal como herramienta colaborativa.

Información y noticias

Flipboard
El lector de RSS más elegante. Para estar al día, FlipBoard nos permite agregar tanto las RSS de las páginas que nos interesan como nuestras cuentas de redes sociales (Facebook, Google+ y Twitter) y nos muestra toda esta información en forma de periódico digital.

Diccionarios y Traductor

Dixio Desktop
El diccionario inteligente de Semantix. La única tecnología multiplataforma de diccionarios capaz de analizar el contexto para ofrecerte la mejor definición y traducción de forma inmediata con solo un clic. Recientemente, Dixio Desktop ha sido premiada por Norman Nielsen Group como aplicación multiplataforma mejor diseñada del 2012.

Comunicación

Skype
El software de comunicación por antonomasia. Es una aplicación multiplataforma que permite chatear y realizar llamadas y videoconferencias gratuitas con nuestros contactos.

Autor: Manuel Jiménez
Fuente: www.semantix.com

14 julio 2012

Atención al cliente



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Presentación utilizada para la realización de un taller de Atención al Cliente, titulada "Operación Cliente Satisfecho", impartida por Proinca Consultores.

07 julio 2012

Elogio de la pereza



La verdadera humanización de nuestras sociedades está en el ocio, en la vacación,
 en la disposición libre de nuestro tiempo para ocuparlo en lo que deseemos.

En 1932, en su ensayo Elogio de la ociosidad, Bertrand Russell planteaba una situación alegórica. Supongamos —decía— que un cierto número de trabajadores fabrican al día, en una jornada de ocho horas, todos los alfileres que necesita el mundo. Supongamos a continuación que alguien inventa un artilugio que permite fabricar el doble de alfileres con el mismo esfuerzo. “En un mundo sensato”, decía Russell, “todos los implicados en la fabricación de alfileres pasarían a trabajar cuatro horas en lugar de ocho, y todo lo demás continuaría como antes”: el empresario seguiría teniendo el mismo beneficio y los alfileres costarían lo mismo. En el mundo real, sin embargo, ya sabemos lo que ocurre: se despide a la mitad de trabajadores y se multiplica el beneficio.
Russell no era economista, y en su planteamiento había una falacia transparente. En primer lugar porque nunca es posible determinar cuántos alfileres o cuántas unidades de cualquier producto necesita el mundo: suele ocurrir que, al mejorar los métodos de fabricación y abaratarse la mercancía, se encuentran nuevos usos y se multiplica la demanda. Y en segundo lugar porque la economía es una arquitectura terriblemente movediza que va desplazando siempre sus engranajes: los trabajadores sobrantes en la industria de los alfileres podrían emplearse en una industria derivada (la de los alfileres de corbata, por ejemplo), en una industria nueva (la del automóvil estaba en pleno florecimiento en la época en la que Russell escribía) o en otra actividad económica diferente a la industrial.
Lo que ocurrió durante décadas en las economías capitalistas, de este modo, fue que los avances tecnológicos, además de incrementar los beneficios empresariales mediante la mejora de la productividad, posibilitaron la prosperidad de amplias capas sociales. Los profesionales y los obreros siguieron trabajando ocho horas diarias, como en 1932, pero pasaron de recibir salarios de subsistencia a mejorar poco a poco sus condiciones laborales: accedieron a viviendas cada vez más dignas, compraron automóviles y renovaron su vestuario cada temporada. Fue la era de gestación de las famosas clases medias.
Pero todo ese rumbo idílico tenía que tener un límite. En un mundo en el que las máquinas pudiesen hacer todo el trabajo —cosa que hoy en día está más cerca de la realidad que de la ciencia-ficción—, cabría preguntarse de qué se ocuparían los seres humanos. Si todos los alfileres y todos los coches y todos los frigoríficos fueran fabricados apretando un botón, ¿qué harían los hombres y las mujeres? Algunos podrían ejercer como profesores, médicos o cineastas —dando por supuesto que la inteligencia artificial nunca alcanzara a la humana—, pero su número sería inexcusablemente corto. En un mundo así, el análisis de Bertrand Russell dejaría de ser una falacia: la inmensa mayoría de los bienes y servicios se producirían sin necesidad de asalariados, convirtiendo la economía, como dice Zygmunt Bauman, en una gran máquina de fabricar “desperdicios humanos” que no tienen ningún papel útil que desempeñar y ninguna oportunidad de ganarse la vida.
Este es el paisaje social que se presintió en los años 90, cuando comenzó a hablarse del reparto del trabajo y de la civilización del ocio. Se nos anunció el advenimiento de la felicidad: la revolución tecnológica copernicana que se estaba produciendo permitiría que los seres humanos dejarán por fin de ganarse el pan con el sudor de su frente y se dedicaran a su familia, a sus aficiones y a sus placeres.
Qué lejanos e irreales nos parecen ahora aquellos tiempos. Hoy se nos pide que trabajemos más horas —por menos dinero—, que agrupemos las fiestas para no distraernos, que nos jubilemos más tarde e incluso que no nos enfermemos si queremos cobrar nuestro salario. Ya no se habla de la civilización del ocio, sino de la cultura del esfuerzo. Como si hubiéramos mordido la manzana de algún árbol prohibido, hemos sido expulsados de un paraíso que ni siquiera llegamos a conocer.
Visto con frialdad, sin embargo, todo parece un gran disparate: en los países desarrollados, las rentas del trabajo —es decir, la suma de todos los salarios que perciben los ciudadanos— tienen cada vez menos peso en la riqueza nacional, lo que significa que se va engrosando crecientemente el número de eso que Bauman llama “consumidores defectuosos”, personas que no tienen dinero para gastar y que no contribuyen por lo tanto al funcionamiento de la economía. Las rentas del capital, por el contrario, son cada vez más grandes, pero como es imposible emplearlas en inversiones productivas, puesto que no hay ya compradores suficientes, se emplean en alimentar bolsas especulativas. Es decir, si todo siguiera así, acabaríamos teniendo un gran productor de alfileres que no necesitaría a nadie para fabricarlos pero que, por la misma razón, no encontraría a nadie que pudiera comprarlos. De este modo se cumplirían, en una versión postmoderna, las predicciones de Marx y Rosa Luxemburgo acerca de la lógica autodestructiva del capitalismo.
La única respuesta sensata a este panorama desolador es la pereza. El enaltecimiento social de la ociosidad y la holgazanería. Es posible que para competir hoy con China o con India tengamos que trabajar más, pero si es así es porque antes se hicieron las cosas mal, porque se abrieron las compuertas de la globalización torcidamente, no porque haya sido inexorable. Vivimos en sociedades ya lo suficientemente ricas y tecnificadas como para que pueda considerarse con seriedad el establecimiento de una renta básica universal, un salario que se cobre simplemente por ser ciudadano del país. Los suizos —que no son extraterrestres ni leninistas— acaban de tomarlo en consideración. Nos convertiríamos así en rentistas de la herencia de nuestros antepasados, y nos podríamos dedicar, como los aristócratas de antes, al diletantismo. Por supuesto, quien quisiera trabajar ganaría más dinero, podría comprarse coches de lujo y tener casas más grandes. Pero lo haría por propia elección, no por fatalidad.
Es falso que el trabajo dignifique. Trabajar —es la parte que más me gusta de la Biblia— es un castigo divino, una maldición que empobrece la mayoría de las vidas. Incluso las tareas más nobles, como la creación artística, se convierten en algo desagradable cuando se hacen a cambio de un salario. La verdadera humanización de nuestras sociedades está en el ocio, en la vacación, en la disposición libre de nuestro tiempo para ocuparlo en lo que deseemos, sea hacer transacciones financieras delante de un ordenador o leer un libro debajo de un árbol.
Ése debería ser a mi juicio el derrotero ideológico de la izquierda europea, como quería Paul Lafargue: el elogio de la pereza. Impedir la competencia con países donde rige el esclavismo laboral, atajar la economía especulativa y propiciar la distribución racional del trabajo. Pero para ello, antes que nada, hay que reconquistar la senda de la cohesión social, porque no es que no haya dinero para pagar el bienestar, como se nos dice cada día, sino que ese dinero está mal repartido. Tony Judt recordaba que en 1968 el director ejecutivo de una compañía como General Motors ganaba sesenta y seis veces más que un trabajador medio de esa empresa, mientras que en nuestros días el director ejecutivo de una firma semejante gana novecientas veces más. Con estas cifras, las crisis serán perpetuas.
Autor: Luisgé Martín es escritor, su último libro publicado es La mujer de sombra.

05 julio 2012

El lenguaje hellooo


Un punto,...

nos indica el fin,
fin de una historia,
fin de una vida,
fin de una etapa.
Pero los dos puntos,
nos dan la esperanza de que algo claro continuará…
Los puntos suspensivos,
sin embargo, nos generan intriga de nuestro futuro…
Te has dado cuenta?
Un simple signo, puede describir nuestros sentimientos
Un signo menos,…
nos transmite una pérdida, algo negativo…
Al contrario un signo mas…
es positivo, nos brinda mas esperanza, mas y mas…
Una x,…
es un abrazo, amor, amistad.
Mientras 3 x,…
Nos sumergen en lo pornográ co, lo prohibido.
En contraposición, una división,…
nos separa, nos distancia, nos divide en clases sociales.
Igual,…
es la igualdad entre personas, de oportunidades…
Una simple variación del signo,…
Representa desigualdad, pobreza, el hambre en el mundo.
y en el lenguaje…
toda comunicación es una exclamación
La comunicación
se ha de nido de muchas formas,
pero…
Comunicación, es simplemente Comunicación
y los signos ayudan a su comprensión
La verdad es…
sin comunicación entre las personas, estariamos pedidos, entristecidos…
Hellooo,... Un signo que demuestra que estarás abierto a la comunicación

10 junio 2012

Pasos para superar la crisis


Hoy, como cada día, vuelves a renacer. 
Hoy, como cada día, es el primer día del resto de tu vida. 
Hoy, ya eres consciente, que tu futuro comienza hoy.


1.-Desaprende lo aprendido
Si haces lo mismo que todos han hecho hasta entonces, volverás a repetir los mismos errores que desembocaron en la crisis.


2.-Desapégate de tu vieja identidad
Si continúas reafirmando el valor de la vida en aquello que ya no tienes, bienes materiales o posición social, tu autoestima –y con ella tu salud- se verá hipotecadamente dañada de cara al futuro.


3.-Dejar ir
Por mucho que te aferres, lo que se tiene que ir se va. Para poder abrir una nueva etapa en tu vida, primero tienes que cerrar la puerta de la anterior. ¿Cómo vas a iniciar de nuevo el camino en busca de un nuevo y brillante horizonte, si cargas una pesada mochila que no te deja moverte de donde estás?

28 mayo 2012

¡M.E.C.! Un empujón para hacer cosas extraordinarias


José Luis Izquierdo,mas conocido como More o Mago More nos presenta desde el ingenio, el humor y el optimismo su visión sobre el cambio de época que estamos viviendo, las oportunidades que nos brinda y cómo saber aprovecharlas.

23 mayo 2012

Herrramienta para mejorar la productividad personal: KanbanFlow


Muchas personas tienen poco tiempo para cumplir con todas sus obligaciones o muchas no saben administrar el tiempo correctamente. Esto último me sucede a mí y quizás a muchos de ustedes. Por eso, resulta interesante conocer KanbanFlow, una aplicación gratuita que nos permite crear listas de tareas con un montón de extras. Tal vez muchos de ustedes terminen convirtiendo a esta app en su favorita, después de leer en qué consiste.

Con KanbanFlow podemos crear tablas, añadir tareas, mover las tareas entre las diferentes categorías, gestionar subtareas, agregar comentarios, etc. La aplicación te permite crear tablas privadas o compartidas, con lo cual también se vuelve un completo ideal del trabajo en grupo. Los cambios que se realicen en la tabla (añadir, mover o borrar una tarea) serán vistos por los miembros del equipo en tiempo real.


abanFlow le permite visualizar qué tareas están en curso, cuáles finalizan, hoy, etc. Pero además la aplicación soporta la famosa técnica Pomodoro, para la gestión del tiempo, la cual consiste en dividir el tiempo dedicado a un trabajo en intervalos de 25 minutos separados por pausas. El método se basa en la idea de que las pausas frecuentes pueden mejorar la habilidad mental.
A cada tarea se le puede asignar un color diferente y añadir una estimación del tiempo que nos llevará efectuarla. Así como también podemos agregarle a cada una de ellas un reloj que sigue la técnica Pomodoro, la cual determina que debemos realizar cada tarea en 25 minutos. Y luego haremos un breve descanso.
KabanFlow es una aplicación muy útil, incluso para el trabajo grupal, especialmente para quienes desean volverse más productivos. Con ella, podremos visualizar el estado actual de todas las tareas pendientes e incluso intentar realizarlas bajo la técnica Pomodoro. ¿Qué les parece esta aplicación? ¿Ya la conocían? ¿Usan la técnica Pomodoro?

Fuente: addictivetips



29 abril 2012

Vigo: Arquitectura perdida


En este video se puede apreciar gran parte de los edificios perdidos de la ciudad de Vigo. Era interesante saber cómo lucirían hoy en día; Por eso, se muestran ubicados en sus emplazamientos originales, pero adaptados en imágenes actuales. 


Primero se ven los edificios existentes y luego desaparecen para mostrar aquellas construcciones que fueron tristemente demolidas. También se pueden observar las mutilaciones y alteraciones en otros edificios, a la vez que estupendas recuperaciones. 


Es importante recordar lo que se perdió, para proteger y cuidar lo que se conserva. Afortunadamente, hoy somos un poco más conscientes de la vital importancia del patrimonio.


Video realizado por Cristian Freire Macías

09 febrero 2012

29 enero 2012

Estos mares no me sirven


“Poca observación y muchas teorías llevan al error. 
Mucha observación y pocas teorías llevan a la verdad”.
Alexis Carrel



Era un hombre brillante, con una inteligencia de esas que surge una cada veinte años. Al menos eso decían de él, y él estaba de acuerdo. Aun cuando nació en tierras del interior, y raramente pasaba algún tiempo en la costa, había dedicado su juventud y madurez al estudio del aprovechamiento energético de los mares.


Lo había leído todo y había desarrollado numerosas teorías innovadoras al respecto. Estaba convencido del gran potencial que los mares tienen en cuanto a proporcionar energía aprovechable a la humanidad, y había convencido al mundo de que él tenía las formulas precisas para ello.


Asesoraba a la ONU, al Banco Mundial, a los Gobiernos de los más grandes países mundiales... Gozaba de altísimo prestigio y de una cada vez mayor fortuna económica, no en balde se le retribuían sus conferencias y consejos a la altura de sus teóricas aportaciones. Solo una sombra empañaba su plena satisfacción, sus conclusiones nunca eran seguidas hasta sus últimas consecuencias, siempre surgían intereses, que él calificaba de espurios, que impedían la consumación de las mismas.


Pero la crisis energética mundial se agravó y puso en grave peligro el sostenimiento de los logros más básicos obtenidos por el progreso tecnológico, incluso el agua potable escaseaba en las grandes poblaciones; y la situación se agravaba día a día. Todas las miradas se volvieron hacia nuestro gran hombre, hacia nuestro “santón” laico de las energías renovables, que por tal era tenido.


La humanidad se postró a sus pies y le rogó que tomara las riendas de la nueva política energética, basada en el potencial de los mares, sobre los que tanto había escrito y hablado.


Cinco años estuvo desplazándose por todos los mares del mundo, “conociéndolos en su realidad” por primera vez, ya que no había tenido tiempo hasta entonces.


Finalmente nuestro Gran hombre convocó una grandiosa rueda de prensa. Todo el mundo estaba expectante ante sus conclusiones, de las que solo existían multitud de rumores, pero ninguna información realmente fiable.
“Señores – anunció-, todos ustedes saben de la altura intelectual de mi trabajo. Durante cinco años he puesto todo mi conocimiento y experiencia al servicio de un proyecto que resolvería el mayor de los problemas de la humanidad. No he escatimado ningún medio, pero finalmente he tenido que rendirme a una conclusión frustrante: ¡Estos mares no me sirven!


Recuerdo la frase del Premio Nobel de Medicina Alexis Carrel (http://es.wikipedia.org/wiki/Alexis_Carrel ) : “Poca observación y muchas teorías llevan al error. Mucha observación y pocas teorías llevan a la verdad”.


Cuantas veces soportamos, en todos los niveles de nuestra sociedad, a este tipo de “expertos” consagrados por la “intelectualidad” dominante, que nos están llevando al desastre, por su desconocimiento de la verdad. Estamos asistiendo a un resurgimiento de la “dictadura de las ideologías” que trata de imponer sus conclusiones al margen de la realidad, y cuando el contraste es insostenible: es la realidad la que no sirve.
Personajes como Jeremy Rifkin, inventor de nuevos fundamentos antropológicos sin personas, y defensor de una vuelta al Medievo en materia energética, y políticos como la misma Ángela Merkel, que hace dos años afirmó sobre la crisis europea que "en cierto modo, es una lucha entre la política y los mercados. Tenemos que restablecer la primacía de la política sobre los mercados", son los que están de moda y su actitud es la de una firme apuesta por sus ideas, que anteponen a la realidad, que sufre el resto de sus conciudadanos.


¿Cuándo se impondrá la vuelta a la sensatez, a la verdad?, que no por ser “la de siempre” ha dejado de ser válida.
¿Cómo acaba la fabula con la que comenzaba? Creo que la NASA, la Agencia Espacial Europea y un consorcio de países pobres pero “progresistas” están buscando nuevos mares en el espacio exterior, para ver si le sirve a nuestro sabio alguno de ellos.


Autor: José Barta
Profesor de Estrategia para Mercados Hostiles
Presidente de Baral Internacional. Banca de inversión

Fuente: Diario Financiero 23 de enero de 2012

17 enero 2012

Reducir costes en la Pyme


El reto para reducir los costes es bajar lo más posible el umbral de rentabilidad, que representa el nivel mínimo de ventas, cuyo margen bruto permite cubrir los gastos de estructura o generales.


Sin perjuicio del enfoque estratégico de costes y del posicionamiento de las empresas para la búsqueda de ventajas competitivas a medio y largo plazo, la reducción de costes es la única respuesta a corto plazo para solucionar la degradación de la cuenta de resultados como consecuencia de:


- Estancamiento de las ventas.
- Disminución del margen bruto de explotación (ventas-costes directos).
- Aumento de los gastos de estructura (generales o indirectos).

09 enero 2012

Las funciones básicas del área económico-financiero

En tiempos de crisis económica y de dificultades a la hora de conseguir la subsistencia, consolidación y crecimiento de las organizaciones, el área económico-financiera adquiere más relevancia de la que habitualmente tiene. Por ello, es un buen momento para analizar someramente las principales funciones clásicas que debe tener asignada este departamento.

La tecnoestructura y el área económico-financiero

Lo primero es recordar que dentro de la estructura de las organizaciones, económico-financiero suele ser una unidad perteneciente a la tecnoestructura según la clasificación de Mintzberg. Por lo tanto, es una unidad de soporte o servicio que proporciona un apoyo directo al desarrollo del negocio pero que no participa directamente del negocio, al igual que sucede con otras áreas como las de RR.HH, por ejemplo. Esto es lo que le da ese carácter tendente a la normalización de todos los procesos y actividades de la empresa.

Esto se traduce en asegurar que esta área asegure una excelencia operacional en el cumplimiento de sus funciones, una gestión adecuada de las relaciones con los grupos de interés externos e internos y una labor de colaboración para la elaboración de planes estratégicos.

Por lo tanto, debe asegurar el correcto control de las transacciones, la comunicación y cumplimiento de las normas externas y la planificación y soporte a las decisiones.

Para este cumplimiento, debe existir una relación basada en unos indicadores de servicio que permitan medir el buen funcionamiento (como si fuera un servicio externalizado), establecer un director de relación entre esta unidad y las de negocio y evaluar de forma continua los costes y beneficios.

Funciones básicas de económico-financiero

Las funciones básicas que debe cumplir todo departamento de económico-financiero son:

1) Control de la contabilidad

Esta función supone captar, medir, organizar, controlar, plasmar y comunicar todos los costes que se producen en la organización.

Esto significa que debe llevar un control de los costes internos (contabilidad analítica o de costes) y de los gastos (contabilidad financiera o comercial).

En el control de los costes internos, el departamento económico-financiero tiene que definir los costes que va a medir (directos/indirectos, fijos/variables, unitarios/totales, oportunidad, por su naturaleza, diferenciales). Una vez que ha detectado los costes que va a medir, selecciona el sistema de costes para su cálculo (parcial/completo). Una vez calculados, debe decidir si emplea un sistema de imputación de costes por producto o por actividades (sistema ABC).

Para controlar la contabilidad externa, esta área tiene que elaborar un presupuesto de tesorería que actualizará regularmente dependiendo del ciclo de explotación de su negocio; generará también cuentas de resultados o pérdidas y ganancias y un balance de situación. Esto le permitirá extractar ratios que ayudarán a ver la marcha de la empresa. Estos ratios miden, en la cuenta de resultados las ventas, los gastos, la productividad y la eficacia, mientras que en el balance miden la rentabilidad, rotación, rendimiento, liquidez y endeudamiento.

2) Gestión de los costes

Una vez que tenemos definidos y controlados los costes, hay que gestionarlos. Para ello se suelen emplear los ingresos y los costes diferenciales a través del margen de contribución para tomar decisiones relacionadas con seguir fabricando un producto, cerrar una fábrica, etc.

3) Presupuestos

Otra de las funciones relevantes es la de elaborar el presupuesto. En primer lugar, debe decidir si el presupuesto va a ser base cero o no.

Una vez decidido, este departamento controlará los presupuestos de ventas, de producción, de compras, de mano de obra directa, de gastos de estructura, etc. Con esto ya se pueden reelaborar los presupuestos de tesorería, la cuenta de resultados y el balance y comprobar desviaciones para sus posibles correcciones.

4) Planes de inversión

El área financiera tiene como obligación diseñar planes de inversión para no disponer de capital ocioso. Esto supone buscar las fuentes de financiación más ventajosas para la empresa, teniendo en cuenta tres variables como son la rentabilidad, el riesgo y la liquidez. Se deberá medir el ROI, calcular el payback, el VAN y la TIR, realizar análisis de sensibilidad y calcular el punto de equilibrio.

5) Planes de financiación

Esta es otra función básica. No solo debe mirar dónde invertir, sino de dónde se debe financiar la empresa al menor coste. Para ello, tendrá en cuenta las variables de coste, plaza y garantías exigidas. Una vez medidas estas variables se decidirá por financiaciones como el factoring, líneas de crédito, efectos comerciales, préstamos, etc, adecuando su uso al momento más indicado.

6) Gestión del riesgo

Con toda esta información, una misión fundamental es la de gestionar el riesgo de la empresa para garantizar su supervivencia. Para ello, vigilará los tipos de cambio, los tipos de interés, los precios, la renta variable y las insolvencias de los clientes para evitar situaciones de peligro y tensión financiera.

7) Políticas de reparto de dividendos

Por último, si la empresa tiene accionistas, este área debe ayudar al consejo de administración a seleccionar la mejor fórmula de reparto y si es conveniente repartir dividendos. Podría ser desde un porcentaje fijo anual sobre beneficio, hasta una cantidad discrecional dependiendo del resultado anual, pasando por una política de dividendo estable por acción.

Como vemos, las funciones básicas de este departamento son indispensables para asegurar que la organización pueda seguir desarrollando su negocio de forma adecuada, por lo que estas funciones deben ser realizadas siempre con especial dedicación y atención, ya sea en época de crisis como de crecimiento.


Autor:Óscar Fajardo


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